O blanco o negro
Pero si los van a aplaudir, ¿Por qué al cabo del primer tiempo, se fueron todos silbados e insultados?
Lamentablemente, el hincha de River llegó a lo que nadie quería, al conformismo, a ser un resultadista, o por lo menos… eso decían no ser…
No discuto que se aplauda a los jugadores luego de la victoria, pero si se fueron insultados en el primer tiempo, cuando el partido estaba abierto, y el resultado 0-0, creo que algo anda mal.
Hay algo que el hincha debe entender, o por lo menos ponerse en claro. ¿Se está o no de acuerdo con el rendimiento del equipo?, ¿ya se borró de sus cabezas la mala imagen, el horror, la pésima actuación en la Copa?, ¿No era que al hincha lo único que le importaba eran los torneos internacionales?, ¿Nos volvemos a conformar con buscar un título más a nivel local, el numero 34?
Después de responderse todas esas preguntas, debería analizar que es lo que pretende de éste River, éste River que, esté el presidente que esté, el técnico de turno y los jugadores de transición, es el mismo River de ayer, hoy y siempre. Las páginas se siguen escribiendo, la historia del club sigue siendo la que se dibuja día a día, entonces ¿Si hoy gana, mañana pierde, pasado gana de nuevo, y así… estamos conformes? ¿Eso queremos? O queremos ver al River de antes, de una década atrás, ese que mechaba juveniles con grandes figuras, y luego éstos eran las grandes cartas y el futuro de un River que parecía no tener un techo.
Pero lógico, todo tiene su techo, como así su piso. Y River ya lo tocó, lo tocó no hace menos de un semestre, lo tocó perdiendo una instancia final de una Copa Libertadores que finalmente parecía ser nuestra, perdiendo en casa, con dos goles de ventaja y con una superioridad numérica deseada, y pese a tener todo a su favor, River se volvía a despedir de ese sueño de ser el rey de América. ¿River o los jugadores? ¿River o los dirigentes?
Otro gran dilema. ¿El hincha a quien culpa? ¿Técnico, jugadores, dirigentes? El famoso que se vayan todos… Bueno, acá está el error.
El hincha, aquel que se volvió resultadista, que se conforma con hoy estar bien y mañana mal, ése, tiene que saber, que para sacar un mal, hay que cortar de raíz. ¿Hay que esperar 9 meses más? Nueve meses… que situación “embarazosa”, no?
Acá hay un culpable, y muchos cómplices. Acá de una vez por todas se tiene que ir la Comisión Directiva y muchos de sus jugadores “berretas”. Jugadores que no están a la altura del club y de las circunstancias. Jugadores, que los propios ídolos del club, tildan, de bajo nivel, para clubes de segunda línea, no para el club con mayor historia del país.
Acá se necesita un cambio lo antes posible, ¿si uds. se pelea con su mujer, la perdonó mas de una vez por infidelidad, pero un día, dijo basta, me harté, va a esperar que ella se vaya cuando le da la gana, o la va a echar uds, porque verdaderamente se cansó de que lo humillen?
Bueno esto es similar. Acá hay un plantel, de 30, 40 jugadores, de los cuales deberían quedar los juveniles y no más de 7 u 8 experimentados. Falcao, Buonanotte, Ahumada, A. Fernandez, Ferrari, Vega, Domingo y un Fabbiani renovado. Si quieren traer a Ortega, que lo traigan, ya que junto con Gallardo, y acá hago un punto aparte, son los único 2 jugadores que sintieron de verdad la camiseta de River.
Lo de Gallardo para elogiar, pero ¿hasta cuando va a entrar el Muñeco y definir el partido en 30 minutos, o en 2 o 3 pases gol? River no es un jugador, son los 11 que están en la cancha, entonces, cuando insultamos, es a los 11 y cuando alentamos estamos alentando a los 11. Hay q ponerse de acuerdo y de una vez por todas alentar a la gente que hay que alentar (jugadores) e insultar, pese que no es la mejor manera, o pedirles que se vayan, a los responsables de esta epidemia que sufre River.
Hernán Quinteros
VÁYANSE POR FAVOR!!!
Es un grito desesperado, un grito con el último aire, con el último aliento del hincha que no para de cantar, el último suspiro, un grito que les pide POR FAVOR que se VAYAN, que den un paso al costado, que NO VUELVAN NUNCA MAS AL CLUB.
Nos HUMILLARON. Y dos veces seguidas, que no es poco. ¿¿¿YA SE OLVIDARON DEL ÚLTIMO PUESTO del campeonato pasado!!!???
Es un mensaje para un puñado de jugadores. Para esos que NO TIENEN SANGRE, esos que les da lo mismo ponerse ESTA camiseta o la de un club de barrio. Para esos jugadores que no corren, que no se entiende como llegaron a primera y menos, que estén “jugando” si es que se puede decir así, por que no se entiende A QUE JUEGAN!!!! Que estén usando, o ensuciando mejor dicho, la camiseta mas grande de la Argentina.
Esos tienen nombre y apellido, y no me refiero al cuerpo técnico, dejemos de echarle la culpa a los entrenadores. De una vez por todas sepamos que en la cancha JUEGAN 11. El que jugó alguna vez al fútbol comprenderá. Los partidos son 11 contra 11, los partidos los ganan esos 11 y los pierden, como hoy y como toda la mitad del 2008 y el comienzo de este año, los jugadores que están en la CANCHA. Si hoy Gorosito pone lo peor que tenemos, caso Sambueza, caso Abelairas, es porque SIMPLEMENTE NO HAY OTRA COSA.
Es lo que tenemos, no hay más. Y acá LA CULPA cae sobre los DIRIGENTES. Esos que se ROBARON TODO, esos que REGALARON a muchísimos juveniles, caso Ludueña, sí, justamente el que metió el empate para San Martín de Porres, resultado que hoy nos dejó afuera.
Por eso, por favor, les respito, la puerta está abierta, VAYANSE, váyase, Sambueza, váyase Abelairas, VAYASE POR FAVOR AGUILAR, de una vez por todas, DA UN PASO AL COSTADO!!!, date cuenta que FUISTE LA PEOR PESADILLA QUE VIVIÓ RIVER. DEJA DE MENTIRLE A LA GENTE DICIENDO QUE SE GANO UNO O DOS CAMPEONATOS. ¡¡ NO NOS INTERESA !! River tiene que pelear siempre arriba, ser candidato, promover juveniles, ser el MÁS grande POR PRESENTE Y NO SÓLO POR PASADO.
La gente se cansó, la gente pide QUE SE VAYAN TODOS. Yo en mis pocos años, lo único que veía era campeonatos. NUNCA UN BOSTERO NOS PODÍA GASTAR, nunca escuche que un hincha pidiera que los jugadores se vayan. Vos sos el culpable de todo y de una vez por todas tenés que hacerte responsable. Te olvidas de las pinchaduras de neumáticos, te de la guerra de los quinchos, te olvidas de los hall?? River es un club, y por sobre todo una institución, no un campo de batalla. ¿Que esperas? Una masacre.
Acá ya hay una muerte, y es la de nuestra historia, mas de un centenar de años tirados por la borda, ídolos e ídolos que pasan por el club como técnicos y tiene que irse insultados, Astrada insultado!!! Uno de los máximos referentes del club, y la gente lo puteo, por CULPA tuya!!!
Así que, verdaderamente no queda mas nada que decir. Andate vos, tu gente y llevate a Abelairas y Sambueza a caminar, así como caminan en la cancha, pero lejos del club, que no vuelvan mas, porque como hincha que soy, me da ASCO Y VERGÜENZA que vistan la camiseta del club.
Hernán Quinteros
A 2 metros de la alegría
No era Fabianni quien la iba a callar a La Boca, sino Falcao. Pero el “apuro” del colombiano, provocó que River quede a sólo 2 metros de la Gloria total y de la reconciliación definitiva con su gente.
Para analizar un clásico hay que dejar de lado muchas cosas. Por empezar, pese a que el planteo, en cuanto al juego, no fue el esperado, verdaderamente se puede hablar de un River ordenado, cuidando bien los espacios, relevándose unos a otros y con una gran firmeza en la defensa, esa que hasta hace una semana atrás, era el peor dolor de cabeza de cara al super-clásico.
Si de méritos se habla, hay que darle la derecha a Gorosito, que le devolvió la confianza a la línea de fondo, y le renovó la chance de ganarse el “enorme” arco Millonario a Daniel Vega.
Y si es una costumbre “pegarle” a los jugadores por sus malos rendimientos, hoy hay que reconocer que River jugó un clásico, de acuerdo a lo que pedían las urgencias.
Es cierto que se llegó poco al arco rival, pero también es verdad que River, gracias al orden que mantuvo durante todo el partido, no permitió que Boca genere muchas chances claras de gol.
Para destacar, las firmezas de Cabral, y Sánchez, de muy bajo rendimiento en el campeonato, quienes no permitieron que ni Palermo, ni Palacios, llegarán con claridad al arco, muy bien defendido por Daniel Vega.
Tal es así, que luego de un primer tiempo en el que el dominador, -mas por control del balón que por juego-, fue Boca, el local se puso en ventaja con un golazo de Palermo, típico de una de sus genialidades, ayudadas por la gran confianza que se tiene el goleador. La única manera de convertir parecía ser por medio de una pelota parada o de este tipo de remates, a los que ya nos tiene acostumbrados Palermo.
Gran gol del “9”, remate de 30 metros de por medio, y una tardía reacción de Vega, ayudada, por al velocidad de la jugada y el inesperado sablazo del delantero.
Minutos después, Palermo mostró lo que es un goleador con confianza, jugada siguiente al gol, tomó la pelota al borde del área, y pifió el remate. Una de cal y una de arena, pero gracias a la confianza, Boca le ganaba 1-0 a River, y el panorama se empezaba a oscurecer, mas que nada, porque arriba Falcao y Fabbiani estaban poco acompañados y carecían de oportunidades de gol.
Por estos motivos y viendose en desventaja, “Pipo” optó, acertadamente, por el ingreso de Rosales y Buonanotte. River generó un poco mas, pero no logró inquietar a Abbondanzieri.
Y si había una única vía para llegar al empate, esa era la pelota parada. Y esa fue. Ayudado por la gran pegada del “Muñeco”, que enterró al Pato, ganando su duelo personal con el arquero de Boca, River llegó a la igualdad.
Y como condimento final, quedó el mano a mano de Falcao, un error, un apuro, una indecisión producto de los nervios, la ansiedad y todo lo que puede generar tener la pelota del triunfo en “tus” pies, dejaron a River a 2 metros de la Gloria, y a Falcao, a 2 segundos de convertirse en ese ídolo que va surgiendo de a poco.
Le faltó ese algo que tienen los grandes, los “tocados”, los únicos. Ortega, la hubiese picado de tres dedos, el Enzo la hubiese colocado milimétricamente junto al palo, Falcao, no se dio el tiempo, ni tuvo la frialdad de definir con el arco sólo, pero lo cierto es que hay que estar ahí, nadie mejor que él para entender que pasó en ese segundo por su cabeza.
Es un clásico, con heroes y villanos. El heroe fue el "Muñeco" y Falcao, no corrió la misma suerte.
Lo cierto es que se vió un pequeño cambio, otra actitud. Un equipo parejo, ni con altos rendimientos, ni muy bajos, un equipo compacto, que pareciera saber jugar los partidos importantes.
Bueno, ahora se viene un calendario difícil, unas pruebas mas, es el momento!! Dos partidos claves por la Copa y el domingo contra el Gimnasia jujeño para no despedirse definitivamente del campeonato.
El cambio está. La actitud se vió. Esperemos que este partido sirva tanto anímicamente en lo grupal como en lo individual y que River vuelva a ser el que todos esperamos.
Hernán Quinteros
Tan Cerca, pero tan lejos.
Lo pudo perder, lo pudo ganar y pudo volver a perderlo, pero empató. Así se presentó el partido contra uno de los equipos que hoy pelea por escapar de la promoción. Pese al buen rendimiento que viene acumulando en los últimos partidos el conjunto platense, y la mala performance de River tanto en la Copa como en el Campeonato, se vio un partido agradable.
Muchas idas y vueltas, dominios repartidos y muchas emociones.
El primer dominador fue Gimnasia, que intentó aprovechar nuevamente los errores defensivos, que ya son HORRORES, del conjunto millonario. Ni Villagra, ni Cabral, ni Sanchez, ni Ferrari, pudieron parar al movedizo Cuevas, gran figura junto al arquero Vega.
El primer tiempo, como en gran parte del torneo, fue para el rival de River, en este caso, el Lobo. El gran rendimiento de Cuevas, desequilibrante, veloz, siempre activo y la ayuda aérea del “Pampa” Sosa permitieron, ayudados por la defensa millonaria y las pocas ideas y falta de creación de River, -nuevamente muy bajo el nivel de Abelairas-, que los platenses se fueran al descanso con el 1-0 a su favor.
Ya en el segundo tiempo, y con algunas caras nuevas, como los juveniles Díaz y Fernández, River intentó llevarse por delante al Tripero, y por momentos lo logró, tanto así, que pese a la falta de juego, consiguió el deseado 2-1 a sólo 20 minutos del final. Pero pasó lo que tenía que pasar, una defensa que hace estragos y una tontera de Ferrari, derribando en el área al chiquitín Cuevas, le dieron, dos minutos después, el deseado empate al Lobo.
Y si se trata de River, también se trata de sufrir. Porque la punta estaba cerca, a sólo dos puntos si se conseguía la victoria. Y River fue, dejando huecos atrás y agrandando las figuras tanto de Cuevas, como de Vega, que tapó todo lo que le tiraron. Y tanto fue, que no consiguió mas que incertidumbres de cara al superclásico. Y la punta estaba tan cerca, que hoy, pese a estar a sólo 4 puntos, y con Boca como próximo rival, esos 4 puntos parecen un mar de distancia, no por la cantidad, sino por la calidad de jugadores y el bajo rendimiento que HOY muestra River.
La puerta está abierta
Desde el comienzo nomás, se vio al equipo uruguayo, replegado en el fondo, tranquilo, pero no dejando jugar producto de las reiteradas faltas y tomándole el pelo a un arbitro sin autoridad, sin templanza y con una falta total de criterio y conocimiento del reglamento;- estuvo 2 minutos para hacer un pique en la mitad de la cancha, no amonestó cuando le faltaron el respeto y ante una falta sobre Fabianni, no volvió la jugada atrás una vez que el delantero perdió le balón-.
Esa fue la cara de Nacional, que consiguió lo que vino a buscar, el empate para asegurarse la clasificación.
La cara de River fue la opuesta, que se llevó lo que MERECIÓ. Los silbidos y los insultos del final. Producto de las pocas ideas, el escaso juego y la ausente garra que se necesitaban para ganar el partido clave de cara al futuro del equipo de Gorosito en esta Copa.
La peor imagen y la mas reprochable de todas fue ver a Rubén Sambuesa, quien se auto-titula hincha fanático de River, caminar los últimos 30 minutos de juego. Pregunta para él. Acaso…¿Estás cansado del trajín de partidos?, no es acaso que sólo jugás la Copa, o sea.. 4 partidos en lo que va del año!!!!!?? Deplorable.
Y sumado a la mala suerte que viene acumulando River hace unos años,-en una misma jugada la pelota fue rechazada en 4 oportunidades en la linea-, hoy, la clasificación es una incógnita, como el futuro del técnico y el relativo buen comienzo de campeonato.
Cuando parecía que algunas nuevas caras le iban a dar otro ánimo al plantel, de una semana a la otra se volvió a oscurecer el panorama de este River que está cada vez más cerca del abismo que de ver la luz.
Es que como bien canta el hincha, los jugadores no se “matan” en la cancha, no “ponen huevos”, no “dejan todo”, como si hace el hincha para ver a River, o por lo menos esa es la clara imagen que uno ve desde las tribunas.
¿Dónde está ese River que arrasaba? ¿Dónde, ese River que al rival que venía a replegarse, lo encerrada contra su arco y no dejaba de darle golpe tras golpe, abriendo la defensa hasta dar definitivamente el “kick” de Knock Out?
¿Dónde están los juveniles?, ¿cuando van a tener su chance?, ¿Dónde los Sand, los Fernandez, los Alvarez, los Ludueña, y un sinfín de jugadores que se regalaron?, ¿Dónde están los Saviola, los Aimar, los D´Alessandro, los Crespo? Por el club no se los ve, y esos mismos jugadores con nombre PROPIO, colgados en sus clubes, ¿por que no vuelven? ¿Por qué van a otros clubes de Argentina?
La puerta está abierta, para que vengan ellos, PERO TAMBIÉN PARA QUE LOS QUE SON CONSCIENTES DE QUE NO ESTAN A LA ALTURA DE RIVER, tanto dirigencial, como futbolísticamente, la crucen, y dejen de faltarle el respeto y de humillar a la institución más grande de la Argentina.
Pongan a la hinchada
Pongan a la hinchada
Lamentable!! Esa fue la actuación y la actitud de los jugadores frente a Racing. Ni uno se salvó, y para peor, el único jugador que deja todo en la cancha, estaba dejando todo en el banco. Se vio a un Falcao, pegado a la línea, rogándole a Dios entrar, pidiendo que el reglamento se pudiera ajustar sobre la marcha, permitiendo un cuarto cambio por partido, para poder saltar a la cancha.
Espectacular!! Esa fue la actitud de la hinchada que no paro de cantar durante los 95 minutos de juego y los `20 de “suplementario” en los que River liquidó a Racing en los tablones.
Lamentable fue la imagen que dejó un River que podía quedar como único puntero,-transitoriamente hasta que Lanus jugase su partido-, y lamentable fue la falta de juego que esta padeciendo el equipo de Gorosito tanto en la Copa como en el torneo.
Ráfagas de Gallardo, empuje de Fabianni, y algo de Rosales,-que tuvo dos claras en sus pies-, pero no mucho mas, fueron las pocas armas que presentó River para lograr alcanzar la punta frente a un Racing que se ahoga en la promoción.
Lamentable, el rendimiento de Abelairas, que luego de un buen campeonato, en el Clausura pasado, dio pena en el Apertura y sigue demostrando su bajo nivel de juego en este Clausura.
Lo mismo para los centrales, que suman partido tras partido, error tras error. Fallas propias de defensores que no están a la altura de la historia del club.
Y arriba más de lo mismo, un Bonanotte flojo en su juego, un Rosales que nunca consiguió el nivel que todos esperábamos y un Fabbiani que buscó mucho el choque pero no consiguió crear los espacios necesarios para habilitar a sus compañeros.
La marca de un aguerrido Racing, que se conformó con el 1-0 y se encerró en su arco, sin ni siquiera intentar hilvanar una jugada de gol en el segundo tiempo, fue mucho para este River que no encuentra el juego, o mejor dicho todavía nunca lo encontró en lo que va del primer semestre del año.
Para replantearse... La falta de juego, la falta de garra y actitud. El hambre por ganar y el poco orgullo de los jugadores, que parecen haberse olvidado del último puesto que consiguieron hace unos meses atrás. SI!! QUE CONSIGUIERON, por que en la cancha entran 11 jugadores, ellos ganan y pierden campeonatos!! No el hincha, que es el que sufre, y alienta sin parar en todos lados donde juegue.
Deberían empezar a replantearse ellos mismos cuales son los errores, las falencias y los desequilibrios que sufre este equipo.
Si ellos no encuentran la solución junto al cuerpo técnico, algo, además del PRESIDENTE, debería cambiar.
Hernán Quinteros